En este día especial enviamos un saludo y abrazo fraterno a los hombres que han tenido la bendición de ser PADRES, admiración por ser luz para sus hijos en base a su ejemplo apegado a los más elevados principios y por ser artífices de la unión familiar, consolidando la paz, amor, respeto.

Orgullosos quienes nos vemos reflejados en un espejo diáfano, sin distorsiones donde ni la obscuridad más espesa le perturba su imagen.

GRACIAS A DIOS POR ELLO.